La dorsalgia, o dolor en la región dorsal de la columna vertebral, es una afección frecuente en la práctica clínica que puede limitar la calidad de vida y el desempeño diario de quienes la padecen. Se estima que un alto porcentaje de la población experimenta episodios de dolor dorsal a lo largo de su vida, siendo una causa común de consulta médica y fisioterapéutica. Dentro de las estrategias terapéuticas para el manejo de esta afección, la manipulación vertebral ha ganado relevancia debido a sus beneficios en la modulación del dolor y la restauración de la movilidad.
Este artículo explora el uso de la manipulación vertebral en dorsalgias, basándose en la evidencia científica disponible, incluyendo el estudio de Romero y Pecho en el repositorio de EsSalud.
La dorsalgia se define como un dolor localizado en la región torácica de la columna vertebral (D1-D12), con causas que pueden ser de origen mecánico, postural, inflamatorio o incluso neuropático. Puede presentarse como un dolor agudo, de aparición repentina y de corta duración, o como un dolor crónico, persistente y con impacto funcional significativo.
Algunas de las principales causas de la dorsalgia incluyen:
Dado que la dorsalgia puede tener múltiples orígenes, el enfoque terapéutico debe ser integral, y una correcta evaluación clínica es fundamental antes de iniciar cualquier intervención manual.
La manipulación vertebral es una técnica de terapia manual en la que se aplica una fuerza controlada y rápida sobre una articulación con el objetivo de restaurar su movilidad. Se caracteriza por ser un movimiento de alta velocidad y baja amplitud (HVLA, por sus siglas en inglés), el cual puede generar un efecto neurofisiológico inmediato, modulando la percepción del dolor y mejorando la movilidad del segmento afectado.
Las bases fisiológicas de la manipulación vertebral incluyen:
El estudio de Romero y Pecho incluyó a 29 pacientes con dorsalgia crónica (duración superior a 5 meses) que habían recibido previamente tratamientos convencionales como reposo, fármacos antiinflamatorios y agentes físicos sin obtener resultados satisfactorios.
Tras la aplicación de manipulación vertebral, los pacientes mostraron una mejoría significativa desde la primera o segunda sesión, lo que sugiere que esta técnica puede ser efectiva en casos donde otros tratamientos han fracasado. Además, el estudio enfatizó la importancia de complementar la manipulación con:
Estos hallazgos coinciden con otros estudios que respaldan el uso de la manipulación vertebral para el alivio del dolor dorsal, especialmente en disfunciones de origen mecánico.
La manipulación vertebral puede estar indicada en pacientes con:
Es fundamental realizar una evaluación exhaustiva antes de aplicar una manipulación vertebral, ya que existen condiciones en las que está contraindicada:
Aunque la manipulación vertebral es una técnica segura cuando se realiza correctamente, pueden presentarse efectos adversos en algunos casos. Según la literatura, los efectos más frecuentes son leves y transitorios, incluyendo:
Los efectos graves, aunque raros, pueden incluir lesiones neurológicas o fracturas, por lo que es imprescindible una adecuada selección del paciente y el dominio de la técnica por parte del terapeuta.
Para garantizar la eficacia y seguridad de la manipulación vertebral en dorsalgias, se recomienda:
La manipulación vertebral es una herramienta eficaz en el tratamiento de dorsalgias, especialmente en casos de origen mecánico. Su efectividad ha sido respaldada por estudios como el de Romero y Pecho, donde los pacientes experimentaron una mejoría significativa tras el tratamiento manual. Sin embargo, su aplicación debe realizarse con criterio clínico, considerando indicaciones, contraindicaciones y posibles efectos adversos.
El éxito del tratamiento con manipulación vertebral radica en una correcta evaluación del paciente, la selección adecuada de la técnica y su integración con otras estrategias terapéuticas, como fortalecimiento muscular y reeducación postural. Con una práctica basada en la evidencia, esta técnica puede representar una alternativa efectiva y segura en el manejo de la dorsalgia.