La anatomía es la ciencia que estudia la forma, ubicación, disposición y relaciones entre los órganos y segmentos de lo que compone a los seres vivos seres vivos. La fisiología es la ciencia que estudia cómo funcionan todos los tejidos del cuerpo. El ser humano está compuesto por 4 tejidos básicos: epitelio, tejido conjuntivo, músculo y nervio, y todas las estructuras están formádas por uno o más de éstos tejidos.
Se hace importante el estudio de la anatomía y fisiología para la fisioterapia debido a que el objeto de estudio de la fisioterapia es el movimiento corporal humano en base a la función, funcionamiento y funcionalidad. Gracias a los conocimientos que tenemos de nuestro cuerpo sabemos cómo nos movemos, cómo se mueven nuestros distintos sistemas (músculo-esquelético, neuromuscular, cardiorrespiratorio y tegumentario fundamentalmente, aunque todas las vísceras también son igual de importantes), sus características básicas, qué función cumple cada una de nuestras estructuras, cómo nos ayudan a desenvolvernos en el medio en el que nos desarrollamos, cómo pueden verse afectadas éstas estructuras, en qué nos afecta su mal funcionamiento y qué podemos hacer para recuperarlas en caso de lesión.
La anatomía y la fisiología son de las materias básicas y fundamentales que un fisioterapeuta debe conocer, es esencial que el fisioterapeuta pueda ubicar una estructura y relacionarla con las estructuras que se encuentran alrededor. La formación de un fisioterapeuta no debe estar separada de la anatomía, y en general, de los profesionales de la salud.